Abogado de acoso

No hay nada sexy en el acoso

La mera idea de acoso sexual evoca una imagen milenaria del todopoderoso jefe masculino quid pro quo-quo a su subordinada dependiente del sueldo. Si bien los prejuicios de género y el acoso en el lugar de trabajo siguen siendo perpetrados con frecuencia por los empleados masculinos contra las compañeras de trabajo, los tiempos han cambiado.

Una asombrosa cantidad de casos ya no se ajusta al estereotipo. Las mujeres y los hombres enfrentan el acoso del mismo sexo y del sexo opuesto por parte de superiores y compañeros de trabajo por igual. El aumento de trabajadores transgénero y transexuales ha traído su propio aumento en el acoso y los impedimentos ilegales para el avance profesional.

El favoritismo mostrado a los empleados que tienen aventuras con el jefe puede considerarse una forma de discriminación sexual o de género. Si esa persona recibe constantemente un trato favorable sobre otros empleados, puede haber una razón para presentar una queja. Ir a trabajar es bastante difícil sin ventajas invisibles e ilegales.

Otra forma de acoso en el ámbito del acoso escolar. Esto ocurre cuando los perpetradores utilizan amenazas, humillaciones e intimidación para sabotear, abusar y controlar a sus víctimas objetivo. El comportamiento vengativo y vengativo de una persona puede expandirse para involucrar a otros en la empresa que se alinean con el acosador, voluntariamente o mediante coacción. Esto no solo perjudica la productividad empresarial, sino que también perjudica enormemente a las personas acosadas cuya carrera, reputación y salud se han visto significativamente dañadas.

Cuando el género necesita un defensor

Atacar a una persona con la intención de conmocionar, agravar, atormentar o aterrorizar significa que definitivamente alguien está participando en un comportamiento de acoso. Así como la idea de igualdad de género surgió de la necesidad de proteger los derechos de las mujeres, las leyes contra el acoso no sexual surgieron de la necesidad de proteger a las víctimas atacadas por motivos de religión, política, ascendencia, raza, etc. de otros factores.

Las leyes son claras. Según el código de California, la Ley de Vivienda y Empleo Justo prohíbe la discriminación, el acoso y las represalias en el lugar de trabajo. Para asegurarse de que los empleadores cumplan con las diversas reglas y regulaciones, el Departamento de Vivienda y Empleo Justo (DFEH) monitorea y hace cumplir las obligaciones bajo la FEHA.

El acoso duele. También viola los derechos civiles básicos de un trabajador y es punible por ley. Si es víctima de acoso sexual o no sexual en el área de Los Ángeles, no sufra en silencio. Hablar alto. Nuestro personal puede ayudarlo a identificar sus opciones antes de tomar decisiones profesionales críticas y posiblemente perjudiciales. Es posible que se le brinde protección bajo la ley y podemos evitar que un empleador participe en represalias ruinosas. Nuestros expertos en leyes de acoso aceptan casos calificados sobre la base de una tarifa de contingencia, por lo que los empleados pagan a nuestro bufete de abogados laborales solo cuando ganamos dinero por ellos.

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